Trabajar desde casa es la herramienta básica de muchos emprendedores pero la actualidad manda y el coronavirus o COVID-19 ha sacado a la palestra la necesidad de este tipo de trabajo para los empleados que deban conciliar o estar en cuarentena.
Por eso siempre trabajo estas 3 reglas básicas en mis sesiones y procesos de gestión del tiempo para que conviertan este sistema en algo productivo puesto que requiere una autogestión de nuestros propios recursos como tiempo y objetivos.
No podemos olvidar que somos nuestros propios jefes y nuestros resultados dependen de nuestra disciplina y concentración , equilibrando nuestra curva de la productividad y de las obligaciones familiares.
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Trabajar desde casa puede ser poco sostenible o improductivo si carecemos de una forma organizada de trabajo y estratégica. Aquí te dejo estas reglas que evitaran caer en el caos.
1. Debes imponerte unas normas de trabajo y respetarlas
Definir un horario para empezar a trabajar y cumplirlo es una manera de localizar tu tiempo y tareas de la forma más productiva para no caer en la tentación de jornadas de trabajo interminables o caóticas.
A veces nos olvidamos de algo tan básico al trabajar desde casa como que tú eres tu propio jefe/a y por lo tanto solo tu tienes la responsabilidad de gestionar de la mejor manera tus recursos y sacar el mayor rendimiento a tu tiempo pero sobretodo compartir que tener un horario y unas tareas diarias delimitadas contribuyen a tener una paz mental potenciando el control y no caer en actividades interminables.
Para ello prengúntate
¿Qué tengo que hacer y cuánto tiempo dispongo?
2. Debes educar a tu entorno a respetar tu tiempo
Al trabajar desde casa muchas veces nuestro entorno no conoce ni respeta nuestro horario laboral y eso conlleva a distracciones e interrupciones en nuestro trabajo limitando nuestras tareas y la consecución de nuestros objetivos.
Es importante que comprendas que trabajar desde casa no te convierte en el recurso fácil para familiares, amigos o vecinos porque tu misión es realizar el mismo trabajo que en un despacho u oficina evitando distracciones o interrupciones que te despisten de tu planificación como acompañar a un medico, ir a la farmacia o cuidar la mascota de tu amigo/vecino.
Fija un horario para recados y tareas domésticas, siempre antes o después pero nunca mientras trabajas y si siempre caes en la tentación pregúntate:
¿Es realmente imprescindible ahora mismo o puede esperar a que termine?
3. Debes crear un espacio de trabajo óptimo
Crear un espacio de trabajo no solo aumenta tu productividad y tu concentración, también te mantendrá competitivo/a en tu mercado y te garantiza los resultados porque te ayuda a mantener el foco en tus objetivos planificados para hoy.
Es fundamental tener un «espacio de trabajo sano» es decir en lo máximo posible un espacio aislado y solo para trabajar con iluminación natural, cómodo y que potencie la productividad, recuerda la mesa de trabajo limpia y ordenada, donde de gusto trabajar con una temperatura agradable y bien aclimatada porque el excesivo frio o calor puede arruinar tu jornada.
Recuerda que tú formas parte de ese ambiente así que vístete de manera apropiada porque una buena imagen es parte de la motivación y de crear una atmósfera productiva.
¿Es tu entorno como te gustaría que fuese o puede mejorar?